Hay sueños que trascienden a quienes los sueñan. Martín Del Farra y Nadia Soledad Perino comenzaron en 2019 esta aventura concreta dando forma al rumbo, un deseo genuino que los unió entorno a la humanidad. Lo que empezó como una idea compartida, pronto se convirtió en una misión que transforma comunidades, personas y realidades.
En 2018, Martín dio el primer paso hacia Monte Quemado, Santiago del Estero, Argentina. Allí, se encontró con una comunidad marcada por el aislamiento y la falta de oportunidades. Un año después, un giro inesperado del destino le llevó al repensar, unió fuerzas con Nadia para brindar acompañamiento virtual a los trabajadores sociales de la zona. Así comenzaron a plantarse las primeras semillas de esperanza.
Nuestra misión es sentar las bases para la formación de personas libres y fuertes, y mejorar la vida en comunidad.
¿Cómo lo hacemos?
Queremos un mundo en donde vivir en paz y con buena calidad de vida sea una realidad, creando una cultura más humana, generosa y compasiva, donde las personas tengan una sana convivencia con su entorno.
Para ello, sabemos que es fundamental adquirir una buena educación social, emocional y en valores.
Contribuimos para que esta educación se haga accesible, que esté al alcance de todos y que sea una herramienta que mejore la calidad de vida de las comunidades del mundo.
Promovemos el bienestar integral de los jóvenes y adolescentes, a través de programas de educación socioemocional.
Brindamos educación en valores y habilidades socioemocionales, complementando la educación formal y asegurando que tengan acceso a una formación integral de calidad.
Preparamos jóvenes con habilidades esenciales para su futuro laboral-emprendedor, fomentando su desarrollo personal y promoviendo el desarrollo económico sostenible.
Nuestro trabajo se enfoca en comunidades desfavorecidas, buscando la inclusión de vulnerabilidad brindando oportunidades educativas y promover la inclusión social.
Acompañamos a jóvenes de poblaciones vulnerables y de muy difícil acceso para que puedan desarrollar proyectos que promuevan el mejoramiento del tejido social comunitario.
A través de espacios de reflexión comprometida, herramientas de desarrollo personal y social, educación emocional y en valores, promoviendo el fortalecimiento de la autonomía y el trabajo en su proyecto vital significativo.
Para que puedan decidir en forma autónoma, forjando juicio propio y con un activo interés en los asuntos comunes, construyendo así un horizonte de prosperidad, solidaridad y cuidado mutuos.
Facilitando espacios de intercambio social, para mostrar distintos modelos de funcionamiento, hábitos y formas de vida.
Actualmente, más de 40 colaboradores que de forma voluntaria se han sumado desde Argentina y el mundo forman parte de este movimiento. Cada uno aporta su conocimiento y su tiempo para llevar sus frutos. Centrado y apuntalado en la educación, nuestro equipo lleva lugares de esperanza, fortaleza y cambio.
Los diferentes equipos, conformados por profesionales reconocidas, son fundamentales en el funcionamiento diario de nuestra Organización, resolviendo y abordando iniciativas en áreas de proyectos, seminarios, eventos, creativos, de gestión institucional y administración.
El destino los llevó aún más lejos. En 2019, Nadia más Martín Quemado y descubrió una realidad que golpeó brutalmente: jóvenes que se suicidaban por desesperanza. Para ella, esta problemática era más que un desafio, era su llamado personal. Tras haber perdido a dos hermanos por suicidio, decidió transformar el dolor en amor, resignificándolo en la causa que envolvería todo el entorno comunitario.